Explicación
Aunque supongo que lo habréis adivinado, mi silencio creativo (llamémosle así) y en este foro se debe a un grave ataque de una dolencia que a menudo aparece en mí pero que ahora se ha producido con una virulencia inusual: misantropía aguda. Como va unido a -por primera vez en mi vida- una placentera sensación de vagancia, os pido disculpas pero os aseguro que no siento grandes remordimientos. Me resisto a publicar, en espera de llenarme -o no- de nuevo con ese necesario fuel para la escritura social que es la capacidad de reacción. Os pido disculpas, sí, y además, paciencia. O no, porque sois muy dueños, como lo somos todos, mientras somos dueños.
Un tiempito más, y veremos.