Es decir, que  gracias a la maravillosa productora y a la manager del hotel, y con la colaboración de una excelente empleada en prácticas que lo traslada todo (y tengo la tira de potingues), he pasado a cero escalones y lo tengo todo en la misma y gran habitación: ducha y bañera con tres grifos, control del aire acondicionado, la cama, el armario, el minibar, el cofre de seguridad, el espejo…. y además es interior y no hace ruido.

Si no fuera por la pata ahora mismo bailaba un mambo con mi sombra. Pero como estoy agotada y feliz, me voy a meter en la camita en cuanto me traigan la camiseta. Gracias por la poesía, gracias por la presencia, por lo bien que os lleváis y por lo inteligentes que sois. Y gracias por la gracia. Por cierto, ¿no sería maravilloso que existiera una ciencia llamada frenética que sirviera para calificar los orgasmos por su grado de similitud? Buenas noches.