Tres noticias relacionadas con el improbable hecho de volar. Una, 68 muertos en un accidente, en Cuba. Pobre gente. Dos, falla el primer modelo Airbús. A ver qué pasa. Tres, el menú de los vuelos de Su Faldosa Santidad: gallego caminito de Santiago, catalán caminito de Barcelona. Lo han contado por la radio. Mejor que en un avión de pago (propio). Y, desde luego, mejor que en Haití, aunque sea en tierra.

Recomiendo el artículo de ayer de Lluís Bassets en El País. Explica muy bien lo que ha hecho Estados Unidos al votar al Tea Party. Qué tiempos vienen.

Desayuno y me pongo a escribir novela, que se me han pegado las sábanas.
Y una coplilla: