Oleada de recuerdos, a raíz del cuelgue de la Alabama Song por uno de vosotros.

Tuve la suerte de ser joven e inquieta en la década anterior a la muerte de Franco, cuando en Barcelona existía un fuerte movimiento teatral inspirado en textos de Salvador Espriu o de Bertoldt Brecht, con personalidades punteras como los ya fallecidos Ricard Salvat y Maria Aurèlia Capmany. En aquella época el teatro era un arma cargada de futuro y Brecht (así como las músicas de Kurt Weill, inseparables de sus obras), un referente de formación.

Hay quien dice que ambos están superados. ¿Tal como se ha puesto el mundo de hoy? Amos, anda.

Buitreando por la red he encontrado este artículo que, tomando como base una reposición brechtiana más reciente, analiza la figura del  inventor del distanciamiento teatral.

De paso, os subo la Balada de la esposa del soldado, en interpretación de santa Marianne Faithfull. No está traducida así que si alguien con más dominio del inglés escrito que yo lo hace, será de agradecer.