Estaba pensando estos días que es muy bonito asistir en directo a la gestación de una novela y a la confección de una colcha, o a la confección de una novela y la gestación de una colcha, es un regalo estupendo, hoy además me ha encantado esa frase ..me falta azul y me sobra angustia, la frase en si misma encierra un mundo. ¡Cuánto calor! digo color. Bueno pues si no puede ser hoy porque están cerradas las tiendas de lanas (cada vez quedan menos) mñana será, seguro que mañana podrás adquirir azul y deshacerte de la angustia.
virginia 23 enero, 2011 en 20:12
Bueno si te falta azul deja la colcha, pero la novela NO, aprovecha esta angustia , trasladala a la novela ¡¡¡¡¡haznos sufrir!!!!!!!!!, es que a mi me e ncanta el suspense. Bueno ahora es la hora ideal para un «gins Tonics» que va muy bien para angustia. Me voy a leer el perdonen que aún no lo he leido y parece que hay controversia . Bueno Besitos
Pilarvv 23 enero, 2011 en 20:42
Pues será otro día, tu esperalo con la pluma preparada y a la angustia le enseñas la calle o el DELETE.
besos azules
AnnaGB 23 enero, 2011 en 21:27
Maruja, esos momentos difíciles del autor o del creador, tú lo llamas angustia, quizás son el estado ideal para que te salga un capítulo redondo. En cuanto a la colcha yo no tendría paciencia para una obra tan larga. Eres tenaz y constante . Así ya se puede uno embarcar en novelas y otras labores…..
tini 23 enero, 2011 en 22:14
Querida Maruja, como los azules sólo los puedes elegir tú misma y las palabras se resisten, espero que te hayas tomado un descanso, boina calada, que hace fresquito y te hayas dado un paseito por la playa…para encontrate con azules y soltar la angustia al viento… Hoy, aunque no lo sepas, ofrecí el silencio para que no tuvieses interferencias…Ahora, que remata el día, sí quiero decirte que espero que mañana sea un día saleroso para tu capítulo…¡¡¡Qué cuesta cerrar!!!
Josefa 23 enero, 2011 en 22:20
Te dejo un trozo de cielo azul y me llevo parte de tu angustia envuelta en un pañuelo blanco.
Carmen O 23 enero, 2011 en 22:29
Si te falta azul mira al cielo, a veces no esta nublado… Y a la angustia dale carpetazo… Un abrazo
carol 23 enero, 2011 en 22:43
Te falta azul azul… ¿o el azul cabrales de Cascos?
Me ha encantado tu artículo de esta semana, como siempre.
Con esa ironía y buen humor que te caracterizan, dile a la Angustias que se vaya a paseo, que estás tejiendo una novela y escribiendo una colcha. Seguro que te hará caso y correrá a esconderse debajo de un renglón.
Saludos, Maruja. Eres una estupenda escritora.
Luna 24 enero, 2011 en 0:50
Doña Maruja Torres: Tiene usted todo el azul del universo y la rodea por todas partes.
Solo queria, a estas horas, después de haber leido su «Perdonen», decirle: GENIAL¡¡¡¡¡
GENIAL. Es Vd. GENIAL!!!!
Agustin 24 enero, 2011 en 1:55
Nunca había sentido esta sensación de intriga con una novela, no ya antes de leerla, si no antes incluso de que este acabada.
Mariola 24 enero, 2011 en 3:03
¿Y por qué no transformas la angustia en color azul?
¡Ánimo para la recta final, Maru!
María 24 enero, 2011 en 9:30
A María Angustias que la den. Que tiene nombre de hembra del Opus antes de asistir a los ejercicios espirituales y después de fornicar cristianamente. Tú, a la novela, y al sex symbol y a la colcha. Y a asomarte para vernos un ratito. Muac.
María Luisa 24 enero, 2011 en 10:03
Entonces es mejor un paseo largo.
farah y los clones 24 enero, 2011 en 10:17
Para la angustia tomo gotas de Passiflora que venden en el herbolario a 8 euros la pieza… treinta gotas tres veces al día. El azul… ¡ay el azul!
electra 24 enero, 2011 en 10:53
Tranquila Maruja, que un parto es un parto y tú has parido mucho, ahí, sin anestesia, que tú puedes…
Cosaria Roja 24 enero, 2011 en 11:00
XD, dejádmela con su angustía que pal tipo novela que escribe , le va del carallo , aims , que ganas que tenemos tos jajaja, seguro que se te condiciona con tanta presióna , jajaja !!pelillos Maruja» y seguro que reviertes todas esas emociones azulonas en tu misteriosa novela…ummmm es uno de mis géneros favoriotos, ya me relamo de gustito …..
Luna lunera 24 enero, 2011 en 23:34
Otra vez ,gracias.
turulata 25 enero, 2011 en 6:40
El azul, pregúntale a Novalis 🙂
Maria 25 enero, 2011 en 10:14
Desenes de miratges, cercles i més cercles, aigua que gira vertiginosa, sempre engolida.
Al mig, la força d’una mirada que juga amb la dolçor de la pell i busca l’arrel fonda de l’aigua.
El que tinc és un llapis a la mà un paper estès davant meu, i el desig d’escriure noms plens de tendresa.
El color és el blau: blau fosc de la tarda, atzur del mar a migdia, blau -blau cel del cel- i el blau cendrós de l’oblit.
Jo no ho voldria i busco el roig de la sang pell endins.
Estaba pensando estos días que es muy bonito asistir en directo a la gestación de una novela y a la confección de una colcha, o a la confección de una novela y la gestación de una colcha, es un regalo estupendo, hoy además me ha encantado esa frase ..me falta azul y me sobra angustia, la frase en si misma encierra un mundo.
¡Cuánto calor! digo color. Bueno pues si no puede ser hoy porque están cerradas las tiendas de lanas (cada vez quedan menos) mñana será, seguro que mañana podrás adquirir azul y deshacerte de la angustia.
Bueno si te falta azul deja la colcha, pero la novela NO, aprovecha esta angustia , trasladala a la novela ¡¡¡¡¡haznos sufrir!!!!!!!!!, es que a mi me e ncanta el suspense. Bueno ahora es la hora ideal para un «gins Tonics»
que va muy bien para angustia. Me voy a leer el perdonen que aún no lo he leido y parece que hay controversia . Bueno Besitos
Pues será otro día, tu esperalo con la pluma preparada y a la angustia le enseñas la calle o el DELETE.
besos azules
Maruja, esos momentos difíciles del autor o del creador, tú lo llamas angustia, quizás son el estado ideal para que te salga un capítulo redondo.
En cuanto a la colcha yo no tendría paciencia para una obra tan larga. Eres tenaz y constante . Así ya se puede uno embarcar en novelas y otras labores…..
Querida Maruja, como los azules sólo los puedes elegir tú misma y las palabras se resisten, espero que te hayas tomado un descanso, boina calada, que hace fresquito y te hayas dado un paseito por la playa…para encontrate con azules y soltar la angustia al viento…
Hoy, aunque no lo sepas, ofrecí el silencio para que no tuvieses interferencias…Ahora, que remata el día, sí quiero decirte que espero que mañana sea un día saleroso para tu capítulo…¡¡¡Qué cuesta cerrar!!!
Te dejo un trozo de cielo azul y me llevo parte de tu angustia envuelta en un pañuelo blanco.
Si te falta azul mira al cielo, a veces no esta nublado…
Y a la angustia dale carpetazo…
Un abrazo
Te falta azul azul… ¿o el azul cabrales de Cascos?
Me ha encantado tu artículo de esta semana, como siempre.
Con esa ironía y buen humor que te caracterizan, dile a la Angustias que se vaya a paseo, que estás tejiendo una novela y escribiendo una colcha. Seguro que te hará caso y correrá a esconderse debajo de un renglón.
Saludos, Maruja. Eres una estupenda escritora.
Doña Maruja Torres: Tiene usted todo el azul del universo y la rodea por todas partes.
Solo queria, a estas horas, después de haber leido su «Perdonen», decirle: GENIAL¡¡¡¡¡
GENIAL. Es Vd. GENIAL!!!!
Nunca había sentido esta sensación de intriga con una novela, no ya antes de leerla, si no antes incluso de que este acabada.
¿Y por qué no transformas la angustia en color azul?
¡Ánimo para la recta final, Maru!
A María Angustias que la den. Que tiene nombre de hembra del Opus antes de asistir a los ejercicios espirituales y después de fornicar cristianamente. Tú, a la novela, y al sex symbol y a la colcha. Y a asomarte para vernos un ratito. Muac.
Entonces es mejor un paseo largo.
Para la angustia tomo gotas de Passiflora que venden en el herbolario a 8 euros la pieza… treinta gotas tres veces al día.
El azul… ¡ay el azul!
Tranquila Maruja, que un parto es un parto y tú has parido mucho, ahí, sin anestesia, que tú puedes…
XD, dejádmela con su angustía que pal tipo novela que escribe , le va del carallo , aims , que ganas que tenemos tos jajaja, seguro que se te condiciona con tanta presióna , jajaja !!pelillos Maruja» y seguro que reviertes todas esas emociones azulonas en tu misteriosa novela…ummmm es uno de mis géneros favoriotos, ya me relamo de gustito …..
Otra vez ,gracias.
El azul, pregúntale a Novalis 🙂
Desenes de miratges,
cercles i més cercles,
aigua que gira vertiginosa,
sempre engolida.
Al mig, la força
d’una mirada que juga
amb la dolçor de la pell
i busca l’arrel
fonda de l’aigua.
El que tinc és
un llapis a la mà
un paper estès davant meu,
i el desig d’escriure
noms plens de tendresa.
El color és el blau:
blau fosc de la tarda, atzur
del mar a migdia, blau
-blau cel del cel- i el blau
cendrós de l’oblit.
Jo no ho voldria
i busco
el roig de la sang
pell endins.
(Montserrat Abelló, Dins L’arrel de l’aigua)