Fanáticos cristianos en Florida permiten a fanáticos musulmanes en Afganistán montar su número sangriento. ¿Por qué no se callan, unos y otros, de una vez? Información de www.independent.co.uk
En otro orden de cosas, me voy a Madrid dentro de un rato. A ver si me conecto desde el avecarril. Feliz domingo.
Cómo cada domingo el Perdonen me hace más llevadero el camino al trabajo. Esos 5 minutos en el metro leyéndote des del móvil me hacen olvidar que un domingo más no me puedo quejar porque por lo menos tengo trabajo por mucho que me puteen
Demencial. No hay por donde «entrale» a esta rocambolesca historia. Por una parte un pastor fanatizado(que ya había saboreado sus «cinco minutos de gloria» en televisión en el aniversario del 11 de septiembre cuando amenazó. también, con quemar un ejemplar de el Corán).Por otra parte una turba exacerbada por una nimiedad que no tiene sentido(la quema de un libro). Por muy sagrado que sea el texto, no hay afrenta sino hay una predisposión para que que aquella se produzca.Todo es un despropósito. No entiendo nada(ni me importa).Allá ellos(siempre y cuando no haya muertes injustas).¿Tanta atención mundial para los actos que pueda realizar un sólo individuo?¿Consecuencias tan graves por actos que no dejan de ser estupideces?
Feliz viaje y feliz domingo.Un saludo.
La verdad es que podían irse todos a …
Son unos provocadores enfermos los unos (que están deseando en el fondo esta respuesta violenta) y, a los otros, les va de coña para desplegar sus desmedidas ganas de matar. En estos casos, es cuando pienso que quizás sería mejor no disponer de tanta información y tan global. Porque asistir a la quema de un libro para reportearlo me parece sólo una forma mediocre de atizar el fuego. Claro como ahora hay que cubrir todo lo que pasa para convertirlo en noticia…..
Yo metería a los unos y los otros en la misma jaula una temporada y me iría con las llaves. Es demencial que unos elementos malignos en Florida nos hagan temblar a todos por miedo a la contestación de otros elementos malignos en Afganistán.
Y lo más fuerte es que son idénticos, son antisociales, psicópatas (creo que es lo mismo), son machistas, prepotentes, protagonistas, adoradores de la nada, violentos de psique, aburridos en definitiva, y si no se tiene imaginación, el aburrimiento es un gran peligro. Aquí lo que correspondería es un suicidio colectivo de todas estas gentes sean de Florida sean de Afganistán.
Feliz estancia en Madrid.
Buenos días Maruja,
te veremos en Valencia en la Feria del llibre?
¡ Estupendo !. Cuando empezará occidente a preguntarse, ¿que hacemos en Afganistán?. ¿Nadie repasa la historia?. Que obsesión de convertir un pueblo que no lo desea. Que casualidad que la mayoría de los «talibanes de iglesía» salgan de la Florida americana. Lugar de apacible retiro de ultraconservadores hispanos, principalmente cubanos.
El Túnez «liberado», ya comienza a enseñar sus formas. Se vuelve a autorizar las fotos de identidad con barba y ‘hiyab’. Un país donde las mujeres gozaban de la libertad más avanzada del mundo árabe. Deseo de todo corazón que sigan mantenido dicho estatuto.
Los mismos bobos con distintos collares
Ambos, (el americano que juzga un libro y lo condena a la hogera, y el fanático de Afganistán que lava la afrenta en sangre inocente) viven en la edad media, la única diferencia en que el primero no lo sabe y el segundo lleva atrapado mil años.
Ambos responsables, ambos absurdos, ambos peligrosos.
Qué pedazo de artículo has escrito para El País hoy domingo, Maruja! No sabes lo que me ayuda leerte, mucha gracias!
Es un OT y, también, publicado hace unos días… aunque el hecho sucedió hace 2 años… pero, como podréis leer en el artículo, se trata de asuntos que transcurren en familia.
Por cierto que el periodista que firma el artículo ha sido recientemente destituido (el dueño del Xornal también lo es de Inmobiliaria San José y el bisnes es el bisnes)
Memoria histórica:
Un 23 de Abril de 1939, día del Libro, en el patio de la Universidad, se celebró un «Auto de Fé». Las palabras rituales fueron pronunciadas por el Catedrático don Antonio Luna:
«Para edificar a España una, grande y libre, condenamos al fuego los libros separatistas, los liberales, los regeneracionistas, los marxistas, los de la Leyenda Negra, los anticatólicos, los del romanticismo enfermizo, los pesimistas, los pornográficos, los de un modernismo extravagante, los cursis, los cobardes, los pseudociéntificos, los textos malos y los periódicos chabacanos. E incluimos en nuestro índice a Marx, Voltaire, Rousseau, Sabino Arana, Lamartine, Máximo Gorki, Remarque, Freud y al Heraldo de Madrid».
Como observaréis no quedó fuera ni uno. Me pregunto qué habría hecho el catedrático Luna con el libro negro de Maruja Torres. De la que te has librado, hermana. ¿Te imaginas? sin fotos, sin viajes y agasajos de promociones…¡qué dolor, que pena! y qué gusto poder disfrutar otro 23 de Abril, otro día del texto y el tejido, con alegría y esperanza, aunque sin mucho convencimiento…
El «Auto de Fé», se celebró en la por entonces llamada Universidad de Madrid.