Aprovecho que la jefa ha ido al kiosco a por la prensa y ha dejado abierto el ordenador del business center con su contrasenya (maldito teclado sin NUESTRA ENTRANYABLE ENYE DE CONYO Y DE ESPANYA), para entrar, porque la muy ladina dice que ha perdido la mia. Seguro que no quiere que os cuente secretos del libro. Estos dias de los follones la he visto muy despegada. La pobre, como tuvo que aprender a dejar de reportear, primero por lo de las rodillas y luego porque la tenian en Beirut sin aprovecharla, pues eso, se fue haciendo a la idea a base de lloreras. Y hoy en dia ni siente ni padece por el hecho de no escribirlo. Ella, con su blog, su face y sus libros, la mar de realizada y contenta.

A mi me ha puesto ya a trabajar. Ahora mismo estoy esperando que esta tarde reanude mi primera escena con Fattush, poniendole al corriente del asunto que nos espera en el Nilo. A mi Fattush me gusta, pero como esta casado y es musulman, por suelto de costumbres que sea, mejor ni lo pienso.

Anda, que viene la jefa. Saludos egipcios.