Me pongo a lo que me pongo, tras escribir la columna: arreglarme y maletica para ir a Pamplona a dar una charleta. Seguiremos en contacto.
Voy a Pamplona
6 Comments
No se permiten comentarios.
Me pongo a lo que me pongo, tras escribir la columna: arreglarme y maletica para ir a Pamplona a dar una charleta. Seguiremos en contacto.
No se permiten comentarios.
Pásalo bien, guapa.
Pues yo, si tuviera que ir a Pamplona, tendría la sensación de que no podía hacer nada antes y estaría expectante hasta la hora de partir. Así me explico tu capacidad para hacer tantas cosas y a todas horas.
…….y no te olvides de tomarte,un buen,bocata de chistorra!!!
Pásalo estupendamente Maruja…Por cierto,de tu «perdonen..» del domingo decirte que las anécdotas que cuentas de las firmas de tus lectores (o no) son muy interesantes y reveladoras…Espero que cuentes más pronto.Me gustó la de la «devolución» del ejemplar 25 años más tarde y la de tus «futuros lectores».Por lo demás no estaría nada mal que nos pudieras contar qué es lo más curioso o conmovedor o estrafalario que has puesto en las innumerables dedicatorias que has puesto para tu «fácil de matar».Bueno,eso si no es mucho pedir o abusar de tu confianza,claro.Un besote Maruja,desde México,y disfruta de tus charlas y amistades.
Acabo de leer el «perdonen». Yo también guardo una primera edición de «Oh es él», el próximo Sant Jordi me lo llevaré para pedirte una dedicatoria atrasada…y ,sin embargo, actual.
Por cierto a todos/as : «La mujer justa» es justo lo que necesitamos. Estupenda la adaptación teatral de Eduardo Mendoza, lo digo por si la representan y os queda cerca.
Muy bien hechos los deberes, Maruja. Haces la maleta, te pones al espejo y nos lo prestas para que nos miremos bien…
En efecto, hemos dado una gran prueba de paciencia y cuando por fin vuelve el ánimo, nos topamos con jarros de agua fría y con esa Dama de cristalinas neuronas rotas, que quiere ser también Marie Antoinette…Demasié p’al cuerpo.
Gracias, columnista.