Gracias, Maruja. Es lo 1º que hago cuando abro El Pais. Y la difundo, siempre. Fuerte. Acertada. Contundente, como un vómito. Ellos tienen más tiempo pero tendremos que gritarle a quienes estén a nuestro lado, parta que reaccionen. Vomitar y seguir. De eso sabemos ya, la lucha es larga, de siempre…aunque de vez en cuando nos entretengamos en los manteles de los asesinos. Vomitar y seguir. Por acumulación, a veces me da la tentación de no seguir leyendo más, de no seguir escuchando mas…Pero con todas las treguas personales que haya que hacer, quienes estemos en condiciones de gritar, habremos de seguir haciéndolo. Vomitar y seguir.
antonioR 29 noviembre, 2012 en 12:49
como siempre,inmejorable o solo superable con otra columna tuya.
Raúl Fernández Justo 29 noviembre, 2012 en 15:41
Es la dictadura perfecta invisible la que ahora gobierna a las dos Españas(la que sube como la espuma aprovechándose de de su posición de dominio, y la que baja a poblar los arroyos y las cunetas con su desposesión y sus heridas recién adquiridas). Es todo un colectivo instalado en el poder,o cercano a él, el que tiene el mandato expreso de «aprovechar el momento». Se ha «Cospedalizado» la vida política(con la boquita se pide aunar esfuerzos, apretarse el cinturón, trabajar por el dizque interés común, y al mismo tiempo se construye un simbólico palacete con vistas a la Historia(el Alcazar de Toledo) con el botín recién adquirido). La oposición hace los coros. Esto va a reventar de mala manera por las costuras más débiles.
Txomin Goitibera 29 noviembre, 2012 en 18:26
La verdad es que sólo se puede hablar de la situación en esos términos. Tienes toda la razón, Maruja.
Ya no basta con salir unos cuantos a la calle (10.000, 100.000, 800.000, es muy poco). El poder económico y político ya ha aprendido a lo largo de los años. Hoy en día un nuevo Ghandi o Luther King no tendrían ningún exito. Estamos domesticados (yo también) y la violencia aunque sea justificada en cuanto a nuestra propia defensa la vemos como algo abominable. Nos machacan día a día, nos mienten descaradamente, se rien constantemente en nuestra cara, la corrupción en este país es elevada a cubo. Y lo aguantamos estoicamente. Ponemos otra mejilla seamos creyentes o no. Tendríamos que volver a la lucha de clases aunque no sé a que nivel. Si no estamos perdidos y sin ningúna esperanza.
Gracias Maruja. Es lo 1
Gracias, Maruja.
Es lo 1º que hago cuando abro El Pais. Y la difundo, siempre.
Fuerte. Acertada. Contundente, como un vómito.
Ellos tienen más tiempo pero tendremos que gritarle a quienes estén a nuestro lado, parta que reaccionen.
Vomitar y seguir. De eso sabemos ya, la lucha es larga, de siempre…aunque de vez en cuando nos entretengamos en los manteles de los asesinos.
Vomitar y seguir.
Por acumulación, a veces me da la tentación de no seguir leyendo más, de no seguir escuchando mas…Pero con todas las treguas personales que haya que hacer, quienes estemos en condiciones de gritar, habremos de seguir haciéndolo.
Vomitar y seguir.
como siempre,inmejorable o solo superable con otra columna tuya.
Es la dictadura perfecta invisible la que ahora gobierna a las dos Españas(la que sube como la espuma aprovechándose de de su posición de dominio, y la que baja a poblar los arroyos y las cunetas con su desposesión y sus heridas recién adquiridas). Es todo un colectivo instalado en el poder,o cercano a él, el que tiene el mandato expreso de «aprovechar el momento». Se ha «Cospedalizado» la vida política(con la boquita se pide aunar esfuerzos, apretarse el cinturón, trabajar por el dizque interés común, y al mismo tiempo se construye un simbólico palacete con vistas a la Historia(el Alcazar de Toledo) con el botín recién adquirido). La oposición hace los coros. Esto va a reventar de mala manera por las costuras más débiles.
La verdad es que sólo se puede hablar de la situación en esos términos. Tienes toda la razón, Maruja.
Kalashnikov http://www.youtube.com/watch?v=CYryevHIZGw
Regurgitar. Me gustó tu columna Maruja.
Ya no basta con salir unos cuantos a la calle (10.000, 100.000, 800.000, es muy poco). El poder económico y político ya ha aprendido a lo largo de los años. Hoy en día un nuevo Ghandi o Luther King no tendrían ningún exito. Estamos domesticados (yo también) y la violencia aunque sea justificada en cuanto a nuestra propia defensa la vemos como algo abominable. Nos machacan día a día, nos mienten descaradamente, se rien constantemente en nuestra cara, la corrupción en este país es elevada a cubo. Y lo aguantamos estoicamente. Ponemos otra mejilla seamos creyentes o no.
Tendríamos que volver a la lucha de clases aunque no sé a que nivel. Si no estamos perdidos y sin ningúna esperanza.