el teatro maría callas, enfrente del ágora

 

el trenecito que conduce a los (escasos) turistas

 

vista de la acrópolis, desde el ágora

 

estatuas a la entrada a lo que fue el odeón de agripa

guapísima por detrás

 

monumento a los héroes epónimos sobre cuyos mitos se fundaron las tribus que dieron origen a la organización del pueblo

aquí se colocaban las leyes fundamentales, esculpidas en mármol, donde los epónimos

el sabio dedo de pedro olalla señala la placa indicativa

 

estatua de adriano vestido de guerrero. si ampliáis, veréis que en la armadura lleva la astuta síntesis divina de grecia y roma: la loba y rómulo y remo, atenea y otros dioses mayores

queda guapa la combinación de arcilla color albero con el rosa de las adelfas, llamadas laurel negro en griego

la clepsidra o reloj de agua que medía los tiempos del los jueces populares

iglesia bizantina del siglo xi construida sobre una antigua fuente

de camino a la estoa de attalos, una humilde alcaparra silvestre nos saluda