DONDE PONGO LA VIDA PONGO EL FUEGO
Donde pongo la vida pongo el fuego
de mi pasión volcada y sin salida.
Donde tengo el amor, toco la herida.
Donde pongo la fe, me pongo en juego.
Pongo en juego mi vida, y pierdo, y luego
vuelvo a empezar, sin vida, otra partida.
Perdida la de ayer, la de hoy perdida,
no me doy por vencido, y sigo, y juego
lo que me queda: un resto de esperanza.
Al siempre va. Mantengo mi postura.
Si sale nunca, la esperanza es muerte.
Si sale amor, la primavera avanza.
Pero nunca o amor, mi fe segura:
jamás o llanto, pero mi fe fuerte.
Que tengáis un buen sábado.
!!!!moooooola!!!!!!
Muchas gracias por hacernos llegar este poema. Nos va a sentar de maravilla , seguro que contribuye a que tu deseo sea más alcanzable. Feliz fin de semana para ti también
Da gusto encarar este sábado con una lectura tan estimulante. A la buena fe que será un buen día. Apapachos pa quien los quiera.
Angel González, siempre bienvenido, siempre oportuno, un compañero de viaje inmejorable, un auténtico «creator spiritus»:
Veni, Angel, mentes tuorum visita…llena nuestros corazones con la gracia y el don de tus palabras. Amen.
¡Ay, que se me va enfadar el Espiritu Santo!.
Gracias, Maruja, por traerle a nuestra memoria ysus tribulaciones
Desde este domingo,empezar el día libre con este poema,es dar mayor luz al día y a las neuronas, tambien una resistencia.
Como diría Goytisolo…
Nunca te entregues ni te apartes
junto al camino, nunca digas
no puedo más y aquí me quedo.
Bonita elección, poco sorprendente viniendo de tí.
Pero nunca o amor, mi fe segura:
jamás o llanto, pero mi fe fuerte.
Nos acaba de dejar Eduardo Falú:
Qué poema tan bello…
No perder JAMÁS la FÉ en ese/a DIOS / DIOSA ÚNICO/A e IRREPETIBLE que cada persona lleva dentro de sí… y tener SIEMPRE, SIEMPRE, ESPERANZA… y una mihita SALUD…
¡¡¡A MOVER MONTAÑAS!!! Esos riscos indecentes que nos ha tocado escalar cuales pobres Sísifos cargados con las mochilas ajenas…
Gracias, Ángel González.
Gracias, Maruja.
Desatado de guerras,
oigo cantar mi viento.
Yo recogí mi corazón perdido
sobre la muchedumbre de las aguas.
Yo soy un desertor entre las huestes
que asaltaron el día.
Bellos como las armas relucen mis amigos:
desde los pechos al talón se visten
con el metal de la violencia.
Ellos imponen su color al mundo,
le arrojan la pedrada del boyero
y atizan el ardor de sus caballos,
para que no se duerma.
Como la espada cortan mis amigos:
bajo su peso tiemblan
las rodillas del día.
Mi corazón no tiene filos de segador:
yo no encendí banderas ni encabrité mi sombra.
No sé lanzarme, recogido y fuerte,
como la piedra del boyero.
¡Ay, negrean los días,
y es tangible su miel!
Sobre su tiempo bailan mis amigos.
¡Quién supiera bailar sobre las uvas,
ágil en la dureza,
bello como las armas!
Algo hay en mí que pesa de maduro,
grita su madurez, pide su muerte:
se derrumba, total, como la sombra
que nace del verdor.
Mi viento desaté sobre mi tierra,
volvióse contra mí toda mi llama:
podado con mi hierro, nutrido de cenizas
creció mi corazón hasta su otoño.
¡Ay, grosura de otoño
quiere ser mi congoja,
y dispersión de mar enriquecido!
Si a mi madura soledad entraras,
amiga, por el puente de las voces,
y pudieras, amigo, sofrenar tu caballo
debajo de mi sombra,
tal vez el manso día no cayese
doblando la rodilla
ni el mundo reclamara la piedra del boyero.
(Desierto está el camino de las voces,
sin freno los caballos.)
Una ciudad a mi costado nace:
su infancia es paralela de la mía y retoza
más allá de mi muerte.
Herreros musicales inventan la ciudad,
afirman su riñón, calzan su pie:
¡baila desnuda al son de sus martillos
la edad de los herreros!
Yel corazón de la ciudad se forja
con el puro metal de las mujeres,
y sobre los metales castigados
es bella y sin piedad esta mañana.
Pero los niños ríen de espaldas a la tierra
o en la margen del gozo:
conspiran bajo el sol de los herreros
para que tenga un alma la ciudad.
De «Odas para el hombre y la mujer» 1929
Muy buen el poema el de Ángel González, por cierto.
Saludos, Maruja.
Hola,Maruja:Gracias por el recuerdo de Ángel. He enviado un mensaje a esta dirección: info@marujatorres.com ,espero que lo leas (no me suele gustar “escribir en público”).Me alegra tu recuperación.Para mí también ha sido un año “peliagudo”,afortunadamente superado.Besos.
Lalunalola
Qué hermosos poemas; Maruja, anónimo. Aquí va uno que he leído recientemente.
GORRIÓN
Guerrita, cago en diez, vaya intemperie,
Ni jergón ni piltrafa, racha mala,
qué perra esta cuaresma, qué gazuza.
Pero no andes ruando; ya verás:
el pan del peregrino, la posada del pobre,
una mata de haba del pesebre.
Y ahora ven y acurrúcate aquí, entre mi pecho,
ten rejo, no te amusties, torea como un hombre,
cuitadiño, ea, bah, ea, ea,
hay días a la contra y qué has de hacer.
De Casa común.