Y llorar también de rabia. Mi hermana trabaja en un hospital de Barcelona y cuando hablamos de las bajadas de sueldo, de los recortes de vacaciones, de la degradación de todo, me dice medio en broma medio en serio que ella dejará de trabajar cuando tenga que pagar por ello. En esas estamos.
Aracne 31 mayo, 2013 en 14:38
Se comenta por sí solo. ¡Qué túnel! Regreso a la caridad de la época preindustrial, tras el largo pasaje y entrenamiento de / en las ONG, surgidas por consejo, prescripción e impulso del FMI, años 80: desactivar partidos políticos y sindicatos; impulsar ONGs. Éxito total. Afortunadamente todavía quedan grandes reservas de empatía, de conciencia y solidaridad aunque a veces o casi siempre se confunda con la caridad. Pena, ternura, tristeza mucha y ¡rabia!…porque la cosa es sublevante, si se tiene memoria. Un hermoso gesto,profundamente conservador, en el mejor sentido de la palabra. Gracias por ofrecernos esta noticia…
masdelomismo 31 mayo, 2013 en 17:07
Hay que dar de comer a los niños en el cole, pagarles las matrículas a los jóvenes, pero no importa, el desgobierno planea la exención de las cuotas de la seguridad social a los empresarios que contraten a jóvenes. ¿Quién va a pagar esa cuotas? los recortes en otros servicios sociales, es decir todos. ¿Y los mayores de 40? ¿como coño van a tener derecho a una pensión digna si no tienen trabajo para poder cotizar y la caja se desvalija?
Raúl Fernández Justo 31 mayo, 2013 en 17:14
El gesto de los maestros que culminan su labor educativa pagando de su sueldo las tasas, matrículas y gastos generados por la selectividad es insólito y provocador. ¿Cómo se atreven a desafiar el uso y costumbre general de robar y aprovecharse de lo público para el propio beneficio?¿ A qué reto a lo establecido se genera con estas conductas tan llamativas?¿Qué estarán pensando Camps, Rita Barberá, la infanta doña Cristina, Barcenas, Rodrigo Rato, Dolores de Cospedal, Mariano Rajoy, Ana Mato, y toda la interminable lista de servidores públicos que metieron sus manos, y sus buenas intenciones, en los dineros públicos?¿ De qué sirvieron tantos sobres llenos de dinero, tantas argucias, maquinaciones, dilapidaciones, sobornos, malversaciones? No es justo que esa labor de rapiña de años venga a ser ahora trastabillada por unos simples profesores que, en inusual y loable osadía,dan el último impulso a sus alumnos para culminar sus años de esfuerzo denodado. No, no es posible que ahora vendan, a la mente de todos, los 26000 euros que cuesta llenar el tanque de combustible del yate real Fortuna (donde los fundillos reales hicieron un ímprobo esfuerzo de abrillantamiento de las proas y popas del mesmo). Que no vuelva a repetirse,si fuere ello posible.
Lola MU 31 mayo, 2013 en 17:49
Si se contasen tantas cosas que se están viendo y haciendo en los centros…. La gente olvida – o ignora – cuánto trabajo en común, cuánto esfuerzo, cuántas emociones y cuántas ilusiones se comparten estos días en los institutos. Los estudiantes que acuden a la selectividad han recorrido un camino largo y, a veces muy difícil (por mucho que digan los bocazas) acompañados siempre por profesores que se preocupan y que los quieren. Es vergonzoso que muchos de esos que se llaman políticos se permitan desacreditar y difamar públicamente al profesorado cuestionando su honestidad y su trabajo. No hay derecho a esto, de verdad. Perdón por el rollo.
Regina 31 mayo, 2013 en 23:46
Hay científicos que tambien ponen dinero para continuar las investigaciones, empresas de servicios sociales que estan aguantando durante meses sin cobrar atendiendo a los mayores y discapacitados que tienen internos a su cargo. Los profesores de universidad pública, claro, llevan varios meses sin cobrar… pero si esto se alarga la caridad al final se agota
Carmen O 1 junio, 2013 en 10:35
Si, ya lo había visto, que sera lo próximo…
Lola Fassía 2 junio, 2013 en 12:19
No sólo pagan tasas, también llevan meriendas y dan material escolar… y los politicastros, tan tranquilos… desgarra el alma… ¿Cómo van a pagar las tasas universitarias estos chicos? ¿Quién va a ayudarles?… y el govien-no pagando un dineral para que un ginecólogo les haga las revisiones a los chichis de oro… La madre que los parió.
Y llorar también de rabia. Mi hermana trabaja en un hospital de Barcelona y cuando hablamos de las bajadas de sueldo, de los recortes de vacaciones, de la degradación de todo, me dice medio en broma medio en serio que ella dejará de trabajar cuando tenga que pagar por ello. En esas estamos.
Se comenta por sí solo. ¡Qué túnel! Regreso a la caridad de la época preindustrial, tras el largo pasaje y entrenamiento de / en las ONG, surgidas por consejo, prescripción e impulso del FMI, años 80: desactivar partidos políticos y sindicatos; impulsar ONGs. Éxito total.
Afortunadamente todavía quedan grandes reservas de empatía, de conciencia y solidaridad aunque a veces o casi siempre se confunda con la caridad.
Pena, ternura, tristeza mucha y ¡rabia!…porque la cosa es sublevante, si se tiene memoria.
Un hermoso gesto,profundamente conservador, en el mejor sentido de la palabra.
Gracias por ofrecernos esta noticia…
Hay que dar de comer a los niños en el cole, pagarles las matrículas a los jóvenes, pero no importa, el desgobierno planea la exención de las cuotas de la seguridad social a los empresarios que contraten a jóvenes. ¿Quién va a pagar esa cuotas? los recortes en otros servicios sociales, es decir todos.
¿Y los mayores de 40? ¿como coño van a tener derecho a una pensión digna si no tienen trabajo para poder cotizar y la caja se desvalija?
El gesto de los maestros que culminan su labor educativa pagando de su sueldo las tasas, matrículas y gastos generados por la selectividad es insólito y provocador. ¿Cómo se atreven a desafiar el uso y costumbre general de robar y aprovecharse de lo público para el propio beneficio?¿ A qué reto a lo establecido se genera con estas conductas tan llamativas?¿Qué estarán pensando Camps, Rita Barberá, la infanta doña Cristina, Barcenas, Rodrigo Rato, Dolores de Cospedal, Mariano Rajoy, Ana Mato, y toda la interminable lista de servidores públicos que metieron sus manos, y sus buenas intenciones, en los dineros públicos?¿ De qué sirvieron tantos sobres llenos de dinero, tantas argucias, maquinaciones, dilapidaciones, sobornos, malversaciones? No es justo que esa labor de rapiña de años venga a ser ahora trastabillada por unos simples profesores que, en inusual y loable osadía,dan el último impulso a sus alumnos para culminar sus años de esfuerzo denodado. No, no es posible que ahora vendan, a la mente de todos, los 26000 euros que cuesta llenar el tanque de combustible del yate real Fortuna (donde los fundillos reales hicieron un ímprobo esfuerzo de abrillantamiento de las proas y popas del mesmo). Que no vuelva a repetirse,si fuere ello posible.
Si se contasen tantas cosas que se están viendo y haciendo en los centros….
La gente olvida – o ignora – cuánto trabajo en común, cuánto esfuerzo, cuántas emociones y cuántas ilusiones se comparten estos días en los institutos. Los estudiantes que acuden a la selectividad han recorrido un camino largo y, a veces muy difícil (por mucho que digan los bocazas) acompañados siempre por profesores que se preocupan y que los quieren.
Es vergonzoso que muchos de esos que se llaman políticos se permitan desacreditar y difamar públicamente al profesorado cuestionando su honestidad y su trabajo.
No hay derecho a esto, de verdad.
Perdón por el rollo.
Hay científicos que tambien ponen dinero para continuar las investigaciones, empresas de servicios sociales que estan aguantando durante meses sin cobrar atendiendo a los mayores y discapacitados que tienen internos a su cargo. Los profesores de universidad pública, claro, llevan varios meses sin cobrar… pero si esto se alarga la caridad al final se agota
Si, ya lo había visto, que sera lo próximo…
No sólo pagan tasas, también llevan meriendas y dan material escolar… y los politicastros, tan tranquilos… desgarra el alma…
¿Cómo van a pagar las tasas universitarias estos chicos? ¿Quién va a ayudarles?… y el govien-no pagando un dineral para que un ginecólogo les haga las revisiones a los chichis de oro…
La madre que los parió.