… que hoy circulan por el Papódromo, puedo aseguraros que seguiré sin ir a misa. Me gustan mucho las iglesias romanas, sobre todo cuando compruebo que, salvo por los turistas, están casi vacías. Y es entonces cuando las visito y me quedo y admiro sus Caravaggios, sus Berninis.

Pero en las calles, ¡Botellón de Agua Bendita!

la santa tuna