Así titulo mi artículo de hoy, el ultimo antes del descanso de agosto:

García-Albiol es el populista en estado puro, el Gil y Gil que el PP nunca alcanzó a tener, pese a sus intentos. La suma bruta –y brutal– de Florianos, González Ponses, Martínez Pujaltes, etcétera, y, remontándonos, Zaplanas y Miguel Ángel Rodrígueces, nunca alcanzó la sólida encarnadura lograda, como quien dice sin esfuerzo, en mangas de camisa, por este caballero de discurso desfachatado, que no desfachado, que, después de utilizar la escoba xenófoba como elemento disuasivo, irrumpe en la política catalana para representar, sin complejos y sin tapujos, al Estado policial al que representa. Camuflándose esta vez de paladín o defensor contra el racismo que, según él, el catalanismo independentista supone. Tiempos estos. Tiempos de canallas.

 Éste es un párrafo, el todo en eldiario.es, como de costumbre.