La exposición en El Cairo
Aquí va una selección. Los paisajes engañosos que parecen pinturas y parten de detalles que el común de los mortales no puede convertir en arte: esos son de Manuel Álvarez Diestro, y a mí me parecen fascinantes Los rostros humanos -figuras tan punzantes como la carcajada del camello- son obra de Toño Labra. Español el primero, mexicano el segundo. Complementarios, en esta exhibición que espero veamos alguna vez en nuestro país. Si es que Cultura no está demasiado entretenida invitando al pederástico senil.