El día después

Desde casa de mi amiga Julia, tras un racional y muy apetitoso desayuno, y dos Clooneys (os subo el link a www.guardian.co.uk, que contiene video), y escuchando «El Mesias» de Haendel mientras nos dedicamos cada una a sus respectivos aparatuquis. Ayer fue un cumpleaños de lo más tranquilo, introspectivo y feliz. Julia vino a despertarme -me ha cedido su precioso dormitorio, cuyos balcones dan a los tejados del viejo Madrid- y me trajo su regalo: un collar de jade elegantísimo. Luego desayunamos -previamente: yo, tumbada en el sofá leyendo periódicos en mi iPad; ella, preparando el desayuno-, y más tarde salimos a comprar al Mercado de Barceló, desde donde saludé mentalmente a Almudena Grandes y a su familia, que viven enfrente. Habíamos decidido tener un día caserito, así que, tras un par de cervezas al sol en la terraza de Santa Bárbara, nos volvimos a casa. Almuerzo y siesta, y a las seis de la tarde, casi coincidiendo con su detención, fuimos a ver «Los idus de marzo», que nos gustó mucho, sobre todo a partir de la segunda mitad, que es cuando la película encuentra su tono justo y toma brío. Es muy inteligente, y tanto George como Roy están muy bien como actores, y muy atractivos. Hay que decir que se mueven entre un gran plantel de secundarios.

En casa cenamos los manjares que habíamos adquirido: nécoras, gambas, mejillones de roca y bígaros, tras una degustación de salchichón ibérico, todo ello con vino blanco.Luego estuvimos mirando el canal Viajar -no queríamos que ninguna serie o peli mediocres nos quitara el buen sabor de «Los idus de marzo». Íbamos comentando, y los comentarios se mezclaban con recuerdos, con recuentos de achaques, con risas… En fin, todo eso que ocurre entre amigas antiguas. Estar en Madrid me devuelve muchas sensaciones: imágenes, sobre todo. Los cines Princesa, la calle Martín de los Heros, el viento frío que barre la plaza de España, siempre tan desasosegada en la meseta…Hoy vamos a ir a comer y a pasear por la orilla del Manzanares, y por la noche tengo cenita con mi primer ex y su mujer única.

Os doy las gracias a todos, por seguir ahí y por vuestras felicitaciones. Besos amadrileñados.